Un debate de dos años sobre la reforma de la UE
Cuando Ursula von der Leyen fue seleccionada presidenta de la Comisión mediante oscuros acuerdos entre bambalinas el pasado verano, prometió un debate serio sobre las diversas preguntas institucionales que causaron revuelo en Bruselas durante las elecciones europeas del pasado año. La conferencia sería el escenario para este debate: la agenda incluirá cuestiones como la forma de salvar el sistema de los ‘Spitzenkandidaten’, como reformar las elecciones europeas y la posibilidad de crear una circunscripción de ámbito europeo para las elecciones europeas. Rompecabezas institucionales aparte, la conferencia tiene previsto cosechar ideas para las prioridades políticas de la UE durante los próximos años.
Por ahora, el formato preciso de la conferencia es desconocido. El Parlamento Europeo y la Comisión han presentado sus visiones respecto a como se debería estructurar el debate, pero el Consejo – que reúne a los estados miembros de la UE – no ha encontrado aún una postura común. Como las principales instituciones de la UE quieren acordar la organización de la conferencia antes de su lanzamiento, la falta de una postura oficial del Consejo pone toda la iniciativa en espera. Entre otras cosas, el Consejo no ha alcanzado un acuerdo respecto a quien debería liderar la conferencia. Durante el invierno, el Parlamento Europeo nominó al eurodiputado liberal Guy Verhofstadt como presidente de la conferencia, pero en el Consejo algunos muestran preocupación ante la perspectiva de dotar al Parlamento de demasiado poder sobre la iniciativa, y sobre Verhofstadt como figura abiertamente federalista al frente de la conferencia.
Por el momento, se espera que durante los dos años de debate, se recojan ideas para el futuro de Europa a través de varios eventos públicos, “ágoras ciudadanas” y una plataforma en línea. Aún así, permanece incierto como las ideas se filtrarán hacia las conclusiones de la conferencia, y cómo se hará un seguimiento de las recomendaciones tras la misma.
¿Hacia una ‘Asamblea Constituyente’ para la federación europea?
Los Jóvenes Federalistas Europeos (JEF-Europa) están siguiendo el debate de reojo. Este abril, la organización adoptó una resolución “llamando a una Asamblea Constituyente europea”, donde definía sus expectativas para la conferencia. JEF cree que la Conferencia sobre el Futuro de Europa debería ser un paso decisivo hacia una verdadera ‘Asamblea Constituyente’ de una federación europea.
La resolución lanza un llamamiento para que la conferencia sea lo más inclusiva posible, reuniendo a representantes de todas las instituciones europeas, así como la ciudadanía europea, y organizaciones juveniles y de la sociedad civil. Ciudadanía y organizaciones estarían involucradas a través de ágoras ciudadanas y jóvenes, herramientas en línea y encuestas.
El foco de la conferencia no debería estar centrado únicamente en torno a políticas concretas sino lo más amplias posible, abordando cuestiones institucionales fundamentales para la Unión. Por ejemplo, el debate debería abordar el reparto competencial entre los niveles nacional y europeo, autonomía fiscal y la conclusión de la Unión Económica y Monetaria (UEM), objetivos de desarrollo sostenible, lucha contra la desigualdad, la actualización del mercado de trabajo a la nueva sociedad digital, la salvaguarda del estado de derecho, el papel de la UE en un nivel global, y la relación entre identidades nacionales y la ciudadanía federal.
Aun así, siendo el objetivo definitivo la creación de una federación europea, a ojos de JEF-Europa la conferencia sería solamente un paso en la buena dirección, seguida por una Asamblea Constituyente genuina. La Asamblea Constituyente no seguiría el proceso establecido de convocatoria de una convención seguida por una conferencia intergubernamental para cambiar los tratados de la UE, sino que debería ser un nuevo ‘momento constitucional’ para Europa. Esto es, la Asamblea Constituyente iniciaría la redacción de una Constitución europea fundamentada en las propuestas concretas emanadas de la Conferencia sobre el Futuro de Europa.
En el caso de que no hubiera voluntad ni apoyo políticos para tal asamblea, el Parlamento Europeo, en opinión de JEF debería, como mínimo, iniciar el proceso de revisión de los tratados siguiendo el mecanismo establecido (definido en el Artículo 48 del TUE). La resolución establece que el proceso de revisión de los tratados debería respetar los resultados de la Conferencia sobre el Futuro de Europa “como la expresión legítima de la voluntad política de la ciudadanía europea y de sus representantes”.
En cualquier caso, las expectativas de JEF-Europa están claras: el resultado de la Conferencia sobre el Futuro de Europa debería traer una renovación institucional a la UE tras años de bloqueo. JEF quiere ver propuestas concretas para una UE más efectiva que pueda enfrentarse a los retos del siglo XXI – y las propuestas deberían ser tomadas seriamente, no ser simplemente dejadas de lado el día siguiente a la conclusión de la conferencia.
En vez de acuerdos entre bambalinas, depende de la ciudadanía decidir el futuro de su Europa de forma abierta y transparente. La Conferencia sobre el Futuro de Europa es la forma de hacerlo de ese modo.
Este artículo solamente representa la interpretación, por parte del autor, de la resolución. Para la posición oficial de JEF-Europa, ver el texto original de la resolución en la página web de JEF.
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